Amarre de amor y curación

Amarre de amor y curación con la poderosa piedra amatista

A la que cuando miras te cambia la vida, pero para ello debes recurrir a este hechizo de amor.

Aunque primero debes entender el objetivo de este conjuro.

La amatista es una variedad de violar cuarto, una piedra preciosa de uso común en la joyería.

El nombre proviene de dos palabras griegas “no” y “intoxicado”.

Porque en el pasado se creía que la piedra para proteger a su dueño de la embriaguez.

Debido a esto, los antiguos griegos usaban collares y otras joyas hechas de amatista.

Y decoraban sus vasijas para beber con la piedra preciosa para protegerlos de la intoxicación.

Amarre de amor y curación

Sin embargo, amatista es sólo una de las muchas formas de cuarzo.

Y una piedra de nacimiento tradicional para el mes de febrero.

Usted notará que febrero es también el mes que los romanos dedicados a Neptuno – el dios del agua.

La amatista es también la piedra para San Valentín – amor de un día celebrada por los amantes de todo el mundo el 14 de febrero.

Tal vez esto se debe a que la piedra está asociado a la unidad, la fidelidad.

Y el amor – atributos comunes asociados a las relaciones prósperas.

A través de las edades, la amatista púrpura se ha mantenido una piedra muy apreciada.

Por su impresionante belleza y sus legendarios poderes curativos.

Asimismo, la amatista primero fue utilizado por los antiguos egipcios.

Amarre de amor y curación

En aquellos tiempos antiguos, se emplea en grandes cantidades en la antigüedad por gemas grabadas.

Los griegos creían que la piedra podría prevenir la intoxicación.

Curiosamente, aunque los primeros soldados europeos llevaban joyas hechas de la piedra.

Con la creencia de que los protegería en el campo de batalla.

También se creía que la piedra mantuvo el nivel de personas se dirigió y llevó poderes curativos.

Cantidades significativas de amatista se han encontrado en tumbas anglosajona en Inglaterra.

Por otra parte, los obispos cristianos occidentales todavía usan el anillo episcopal hecha con amatista.

Además, las amatistas también se han encontrado en América del Sur, aunque en cantidades más pequeñas.

Por ejemplo, una gran geoda, la “gruta de amatista” de Santa Cruz de Brasil.

Atrajeron grandes multitudes cuando se presentó en una exposición en Alemania a principios del siglo 20.

Hoy en día, se cree que la amatista contiene tiocianato férrico y trazas de azufre se han encontrado en el mineral.